Autora del fic o historia: Maite
Twitter: Maiseo94
Nombre del fic o historia: One chance.
Tema: Hetero, +18, fanfic [Zico x Fan, Ukwon x Fan, Rain x Fan.], Block b, serie.
-Cápitulo 25.-
#Varios días después.
-Voy a matarla… ¿Por qué no me lo coge?- Miré el teléfono
mientras fruncía el ceño. Ya iban cinco veces que llamaba a Sandy y no me lo
cogía.
Dejé el teléfono en uno de los bolsillos delanteros de mi pantalón: odiaba meterlo en el bolso. Tenía la esperanza de que ya vería las llamadas y me llamaría. Suspiré y seguí caminando hacia la parada de bus para ir al trabajo.
Tenía que hacer un tatuaje que me llevaría toda la tarde, pero gracias a dios tenía a Rose en la sala. Podría pedirle que me ayudara un poco y puede que le pidiera que me hiciera un cambio de estilo, que ya era hora de que me hiciera algo en el pelo.
Cuando llegué a la sala, Rose me esperaba por fuera, fumándose un cigarro.
Dejé el teléfono en uno de los bolsillos delanteros de mi pantalón: odiaba meterlo en el bolso. Tenía la esperanza de que ya vería las llamadas y me llamaría. Suspiré y seguí caminando hacia la parada de bus para ir al trabajo.
Tenía que hacer un tatuaje que me llevaría toda la tarde, pero gracias a dios tenía a Rose en la sala. Podría pedirle que me ayudara un poco y puede que le pidiera que me hiciera un cambio de estilo, que ya era hora de que me hiciera algo en el pelo.
Cuando llegué a la sala, Rose me esperaba por fuera, fumándose un cigarro.
-¿Cuánto llevas aquí?- Le dije antes de quitarle el cigarro,
tirarlo al suelo y pisotearlo, a lo que ella respondió mirándome mal.
-Acabo de llegar. Me ha traído tu primo el buenorro.- Dijo,
antes de rebuscar en su bolso algo. Supuse que era la caja de cigarros.
-¿Rain? Uuuuuuuuuuy, eso significa algo querida. Y como
vayas a sacar otro cigarro te confisco la caja.- Le dije mientras cogía las
llaves del bolso y abría la sala. Por suerte, no había llegado el cliente.
-Mira que eres cabrona… Pero bueno, te lo permito… Pero sólo
porque me vas a invitar a algo después de que termines.- Dijo, sonriente.
Sonreí y asentí mientras entraba y encendía las luces.
-Que lista eres Rose, ¿no?- Dije, bromeando.
-Pues claro, ¿qué te crees?- Pasó por delante de mí y se
sentó en el sofá en el que se solían sentar los clientes. – ¿Hoy cuantos
tatuajes tienes que hacer?-
-Uno y de los grandes. Por cierto, cuando termine quiero que
me hagas algo en el pelo, estoy aburrida de tenerlo así. Y te lo pago
invitándote a una pizza. ¿Qué te parece?-
-¿Qué quiere que le haga la señora?- Dijo mientras hacía una
reverencia, claramente, sin levantarse del lugar.
Reí y me tiré al lado de ella, esperaba que llegara el
cliente cuanto antes.
#Horas después.
-Bueno, ¿qué quieres que te haga?- Dijo Rose mientras tocaba
mi melena rubia.
-Mientras que no me dejes calva, lo que quieras.-
-Hm... Vale, pero solo te voy a pedir que cierres los ojos y te pongas los cascos. ¿De acuerdo? En
cuanto termine, te doy unos toques en el hombro.-
Asentí y seguí sus instrucciones.
…
Después de una hora y media, Rose me tocó el hombro, haciéndome
entender de que había terminado.
Me quité los cascos y abrí los ojos… Y de paso la boca.
Rose me había cortado el pelo, haciendo que me quedara por encima de los hombros y había puesto un azul eléctrico en las puntas.
Me quité los cascos y abrí los ojos… Y de paso la boca.
Rose me había cortado el pelo, haciendo que me quedara por encima de los hombros y había puesto un azul eléctrico en las puntas.
-¿Y bueno?- Dijo Rose sonriente, se veía orgullosa de lo que
había hecho.
-Eres la puta ama.- Dije, antes de levantarme y abrazarla. –Bueno, lo prometido es deuda. Hoy toca el
tomar algo y mañana la pizza. ¿Vale?-
-Entonces será pizza más postre.- Cogió su bolso y de paso
me tiró el mío.
-Venga vale. Bueno, ¿quieres ir a algún sitio en especial?-
Dije, cogiendo el bolso al vuelo.
-No tengo muchas ganas de caminar, así que vamos al bar que
está aquí al lado. ¿Has entrado alguna vez?- Salió de la sala y yo apagué todas
las luces, para después reunirme con ella y cerrar el local.
-Pues la verdad que no, espero que esté bien.- Guardé las
llaves en el bolso y nos encaminamos hacia el bar. Estaba a menos de cinco
minutos caminando, por lo que se veía se llamaba ‘’Overdose’’ y parecía ser
bastante moderno. Entramos y vimos que no había mucha gente, simplemente había
un grupo de chicas sentadas en unas sillas y lo que parecía ser una parejita en
la barra.
Nos acercamos a la barra y pedimos dos cervezas.
-Bueno, ¿qué tal te va con mi hermano?- Dijo Rose sonriendo
pícaramente. –Es que le pregunto y nunca me dice nada.-
-Entre tu hermano y yo no pasa nada.- Dije antes de que trajeran
las cervezas.
-Ah…Entonces la foto que hay en su teléfono de ti durmiendo
en su cama es falsa. ¿No?- Cogió una de las cervezas sonriendo, mientras que yo
me ponía roja como un tomate.
-¿Qué tu hermano ha hecho qué? Le mato… te juro que le
mato.-
-Jé, es lo que tiene quitarle el móvil en cuanto no se da
cuenta.- Dio un trago a su cerveza mientras yo la cogía aun sonrojada y le daba
un sorbo.
-Kim, cuéntame más de la paliza que le diste el otro día al
chico, quiero fardar con las chicas.- Pude escuchar de la chica que estaba
hablando con lo que parecía ser su pareja.
-Mira que eres pesada Yuri, ya te lo dije fue a uno de los
del Underground, que nos están quitando la puta clientela. Seguro que han
contratado a alguna guarra que enseñe.- Dijo el chico.
Dejé la cerveza mientras apretaba una de
las manos y miraba a Rose, que estaba con la boca abierta y susurraba.
-Mai….¿Es uno de los que le hicieron eso a…- No le dejé
terminar la frase y me acerqué al chico, con una sonrisa algo picarona.
-Hola guapo, ¿me invitas a algo?-
El chico me miró de arriba abajo y sonrió. Los pantalones
cortos y la camisa de tirantes que llevaba hacían que se me viera bastante
piel.
-He oído que le has metido una paliza a uno de los del
Underground… Así se hace, son unos hijos de puta.- Dije mientras seguía
sonriendo.
-Eh tú, zorra, apártate de mi novio.- Dijo la chica al lado
suyo.
El chico se giró y casi le gritó.
-Anda, lárgate petarda, ¿no ves que estoy ocupado?-
La chica se quedó boquiabierta y seguidamente se echó a
llorar y salió corriendo del bar. Bah, seguramente encontraría otro a quien
tirarse.
Se giró y me miró nuevamente mientras sonreía pícaro.
Se giró y me miró nuevamente mientras sonreía pícaro.
-¿A ti también te caen mal?-
Asentí con suavidad y me acerqué más a él.
-Entonces esto se merece que te invite a algo. – Pidió un
coctel y volvió a mirarme.
-Bueno… Mientras esperamos, ¿por qué no me cuentas lo que le
hiciste?- Dije mientras posaba uno de mis dedos sobre el pecho de aquel hijo de
puta.
-Bueno… Le cogimos entre dos mientras estaba desprevenido y
le pegamos una buena paliza y de paso unos cuantos golpes con unos palos..
Seguramente que está en el hospital. – Dijo orgulloso.
Llegaron los cocteles y cogí el mío.
-Hm… Si supieras que me parecen los chicos como tú…- Dije
antes de dar un sorbo.
-Ah sí, ¿el qué, preciosa?- Dijo mientras se acercaba
demasiado a mí.
-Un puto asco.- Dije mientras sonreía y le echaba el coctel
encima. Y antes de que se pudiera dar cuenta, había dejado la copa y le había
cogido del paquete, apretándole con demasiada fuerza, pero, ¡qué coño!, se lo
merecía.
-¡AH! MALDITA ZORRA. – Dijo mientras levantaba una de sus
manos.
Negué suavemente y le dije. –Si quieres que tu cosita
funcione para el resto de tu vida, no te aconsejo que lo hagas. Y de paso dime
quien es el otro hijo de puta que le hizo eso a mi amigo.- Sonreí ampliamente y
supuse que Rose estaría boquiabierta detrás de mi.
-¡AH! VALE VALE, TE LO DIRÉ, PERO NO APRIETES MÁS. SE LLAMA
TAE Y…-
-¿Y dónde me lo puedo encontrar hoy?- Dije mientras apretaba
con más fuerza.
-¡AHHH! EN….EN LA DISCOTECA… MIRACLE… SUELTAME TE LO
SUPLICO.-
Le solté poco a poco y cogí de su bolsillo su móvil, no
quería arriesgarme a que le avisara.
-EH, MALDITA ZORRA, DAME EL MÓVIL.-
-¿Seguro que quieres que vuelva a apretar?-
No tardó ni una milésima de segundo en negar y le solté. Cuando
hice amago de irme, me volví a girar y le pegué un puñetazo en la barriga. Por
fin, las clases de auto-defensa me había servido de algo.
-Vamos Rose. Por cierto, ¡camarero! El hijo de puta de aquí nos
invita, así que ya sabe.- Sonreí ampliamente antes de salir con Rose del bar.
Nota de la autora: Sep, he vuelto y espero poder escribir seguido o aunque sea terminar este fic. ♥
1 Opiniones~:
Tulis Opiniones~Me encantaaaaaaaaaaaaaaaa ^^ HALA QUE LE HA PEGAO UNA PALIZAAAAAAAAAAAAAAAAA
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