Autora del fic o historia: Daniel.
-Capítulo 1.-
Se contempló unos segundos al espejo, antes de esbozar una enorme sonrisa. Se sintió atractivo, por fin, después de tanto tiempo.
La corbata bien anudada, la chaqueta de su elegante traje ónix perfectamente planchada y limpia. En los pantalones, ni una leve muestra de suciedad. Su cabello peinado con su característica personal.
Se sonrió una vez más.
Por fin estaba preparado.
El celular vibró en su bolsillo. Se apresuró a sacarlo y a contemplar la luminosa pantalla. Allí estaba, el nombre del impaciente Seungri, llamándole por cuarta vez. Suspiró, colgándole de nuevo. Se miró una última vez al espejo, retocándose la corbata y, acto seguido, se dirigió hacia la salida de su apartamento.
Mientras bajaba por el ascensor, el móvil le sonó de nuevo. Esta vez, sí lo cogió:
- Seungri, ya estoy bajando. Perdona por no coger el teléfono, pero no lo escuchaba.
- No pasa nada, Tae - Murmuró el maknae del grupo, riendo ligeramente. - Es tu cumpleaños y se te permite casi cualquier cosa. Haz de rogar a tus invitados. Que sufran.
- ¿Invitados? Espero que no me hayas montado una fiesta a traición, pequeñajo. - Otra risa. Escuchó una segunda voz tras la de Seungri, pero no la reconoció.
- No, no, tranquilo. Seremos solamente nosotros, como nos habías dicho. ¿Te gustaría ir a tomar algo después de cenar?
- Claro, será divertido ver a TOP borracho.
El ascensor alcanzó la planta baja. Colgó el teléfono sin despedirse, dirigiéndose rápidamente hacia la salida del edificio. Le esperaba Seungri, apoyado en un deportivo rojo, demasiado llamativo para su gusto. Al volante del coche, G-Dragon le observaba, sonriendo.
- ¿Has conducido TÚ? - Inquirió, saludando a Seungri con un abrazo, y encarándose luego hacia G-Dragon. - ¿Hasta aquí?
- Claro. Ha sido un paseo agradable. - Murmuró, indicándoles que se subieran al coche, con un suave gesto. - Además, le he procurado a Seungri un par de sustos bastante...divertidos, podríamos llamar.
- ¿Acelerando en la autopista? - Taeyang subió donde el copiloto, mientras el maknae lo hacía en el asiento trasero, saltando por encima del coche.
G-Dragon, asintiendo, arrancó el coche, y salió disparado de la zona de estacionamiento del edificio. Segundos más tardes, se encontraban en la carretera, camino hacia el sitio en el que se reunirían con TOP y Daesung.
Les esperaba una agradable cena, cocinada por el mismo Daesung. Luego, tal vez salir de copas con los amigos a tomar algo. No requería nada más para sentirse feliz en su cumpleaños. Lo único que quería era celebrarlo con sus amigos cercanos.
- ¿Os importa si pongo algo de música? - Preguntó G-Dragon, a lo que los otros dos respondieron con una negación de cabeza.
En la radio, comenzó a sonar ''My Heaven''. Se miraron, con una sonrisa.
El viaje era algo largo, a través de una autopista rodeaba de una arboleda impresionante por ambos lados. Sobre ellos, un cielo intensamente azul les vaticinaba un día maravilloso. Ni una molesta nube en el aire. Se sintieron satisfechos, pues el clima acompañaba a lo sorprendente que sería aquel día.
Ni un sólo vehículo a la vista, ni tras ellos, ni en dirección contraria.
Sin preocuparse por intercambiar palabras, disfrutaron del largo paseo, de la brisa y del ligero sol que les acariciaba sus bronceadas pieles.
G-Dragon empezó a girar el volante, pues la curva de la carretera les indicaba que, por fin, se aproximaban a su destino.
Después de tanto rato, Seungri habló por primera vez:
- Taeyang, ¿qué te gustaría recibir como regalo?
- Sí, cierto. Apenas hemos hablado de eso desde que planeamos tu cumpleaños. ¿Qué te gustaría recibir como regalo? - Taeyang se encogió de hombros, ante las preguntas de sus dos amigos.
- En realidad, no necesito nada. Sabéis que soy muy conformista con cualquier cosa.
Ambos asintieron, pero no dijeron nada. A Taeyang le extrañó aquella actitud, pero tampoco lo mencionó.
Por fin, al final del camino, vieron la casa, una sorprendente construcción en medio de un claro rodeado por pura naturaleza. Preciosa, simplemente. El hogar de los cinco, lejos de la civilización.
Detuvieron el coche frente a la puerta del garaje. Accedieron a la casa por la puerta delantera, y entraron, sin tocar el timbre. Todo estaba a oscuras.
De pronto, la voz de G-Dragon sonó más siniestra de lo normal.
La puerta se cerró, violentamente. Taeyang pensó que algo no andaba bien, que todo era demasiado... extraño.
- Perdóname, Taeyang... - Se giró, observando a G-Dragon, quien tenía una expresión funesta en la mirada.
Twitter : @LeonheartTribal
Nombre del fic o historia: Come to my party.
Tema : Hetero, romántico, comedia, [Taeyang x Fan], BIGBANG , mini-serie-Capítulo 1.-
Se contempló unos segundos al espejo, antes de esbozar una enorme sonrisa. Se sintió atractivo, por fin, después de tanto tiempo.
La corbata bien anudada, la chaqueta de su elegante traje ónix perfectamente planchada y limpia. En los pantalones, ni una leve muestra de suciedad. Su cabello peinado con su característica personal.
Se sonrió una vez más.
Por fin estaba preparado.
El celular vibró en su bolsillo. Se apresuró a sacarlo y a contemplar la luminosa pantalla. Allí estaba, el nombre del impaciente Seungri, llamándole por cuarta vez. Suspiró, colgándole de nuevo. Se miró una última vez al espejo, retocándose la corbata y, acto seguido, se dirigió hacia la salida de su apartamento.
Mientras bajaba por el ascensor, el móvil le sonó de nuevo. Esta vez, sí lo cogió:
- Seungri, ya estoy bajando. Perdona por no coger el teléfono, pero no lo escuchaba.
- No pasa nada, Tae - Murmuró el maknae del grupo, riendo ligeramente. - Es tu cumpleaños y se te permite casi cualquier cosa. Haz de rogar a tus invitados. Que sufran.
- ¿Invitados? Espero que no me hayas montado una fiesta a traición, pequeñajo. - Otra risa. Escuchó una segunda voz tras la de Seungri, pero no la reconoció.
- No, no, tranquilo. Seremos solamente nosotros, como nos habías dicho. ¿Te gustaría ir a tomar algo después de cenar?
- Claro, será divertido ver a TOP borracho.
El ascensor alcanzó la planta baja. Colgó el teléfono sin despedirse, dirigiéndose rápidamente hacia la salida del edificio. Le esperaba Seungri, apoyado en un deportivo rojo, demasiado llamativo para su gusto. Al volante del coche, G-Dragon le observaba, sonriendo.
- ¿Has conducido TÚ? - Inquirió, saludando a Seungri con un abrazo, y encarándose luego hacia G-Dragon. - ¿Hasta aquí?
- Claro. Ha sido un paseo agradable. - Murmuró, indicándoles que se subieran al coche, con un suave gesto. - Además, le he procurado a Seungri un par de sustos bastante...divertidos, podríamos llamar.
- ¿Acelerando en la autopista? - Taeyang subió donde el copiloto, mientras el maknae lo hacía en el asiento trasero, saltando por encima del coche.
G-Dragon, asintiendo, arrancó el coche, y salió disparado de la zona de estacionamiento del edificio. Segundos más tardes, se encontraban en la carretera, camino hacia el sitio en el que se reunirían con TOP y Daesung.
Les esperaba una agradable cena, cocinada por el mismo Daesung. Luego, tal vez salir de copas con los amigos a tomar algo. No requería nada más para sentirse feliz en su cumpleaños. Lo único que quería era celebrarlo con sus amigos cercanos.
- ¿Os importa si pongo algo de música? - Preguntó G-Dragon, a lo que los otros dos respondieron con una negación de cabeza.
En la radio, comenzó a sonar ''My Heaven''. Se miraron, con una sonrisa.
El viaje era algo largo, a través de una autopista rodeaba de una arboleda impresionante por ambos lados. Sobre ellos, un cielo intensamente azul les vaticinaba un día maravilloso. Ni una molesta nube en el aire. Se sintieron satisfechos, pues el clima acompañaba a lo sorprendente que sería aquel día.
Ni un sólo vehículo a la vista, ni tras ellos, ni en dirección contraria.
Sin preocuparse por intercambiar palabras, disfrutaron del largo paseo, de la brisa y del ligero sol que les acariciaba sus bronceadas pieles.
G-Dragon empezó a girar el volante, pues la curva de la carretera les indicaba que, por fin, se aproximaban a su destino.
Después de tanto rato, Seungri habló por primera vez:
- Taeyang, ¿qué te gustaría recibir como regalo?
- Sí, cierto. Apenas hemos hablado de eso desde que planeamos tu cumpleaños. ¿Qué te gustaría recibir como regalo? - Taeyang se encogió de hombros, ante las preguntas de sus dos amigos.
- En realidad, no necesito nada. Sabéis que soy muy conformista con cualquier cosa.
Ambos asintieron, pero no dijeron nada. A Taeyang le extrañó aquella actitud, pero tampoco lo mencionó.
Por fin, al final del camino, vieron la casa, una sorprendente construcción en medio de un claro rodeado por pura naturaleza. Preciosa, simplemente. El hogar de los cinco, lejos de la civilización.
Detuvieron el coche frente a la puerta del garaje. Accedieron a la casa por la puerta delantera, y entraron, sin tocar el timbre. Todo estaba a oscuras.
De pronto, la voz de G-Dragon sonó más siniestra de lo normal.
La puerta se cerró, violentamente. Taeyang pensó que algo no andaba bien, que todo era demasiado... extraño.
- Perdóname, Taeyang... - Se giró, observando a G-Dragon, quien tenía una expresión funesta en la mirada.
1 Opiniones~:
Tulis Opiniones~HOSTIA QUE SE CARGAN A TAEYANG D: NOOOOO
ReplyYO QUIERO SABER QUE PASA T___T ¿SE LO CARGAN O NO?
Está muy interesante pero como se lo carguen el dia de su cumpleaños ;-;...