Autora del fic o historia: Sandra.
Twitter : @Aonlything
Nombre del fic o historia: Don't worry little baby.
Tema : Hetero, MYNAME ( MYNAME x Fan), +18.
-Capítulo 3.-
Una semana había pasado desde que había empezado a trabajar,
mi relación con los compañeros era buena, tenía ciertos roces con el jefe de
estudios por esa manía suya de definir a mis alumnos como “escoria”, a veces sentía
unas ganas irrefrenables de hacerle tragarse sus corbatas horteras. Esa mañana me tocaba tutoría, ciertamente aún
no había hecho grandes progresos con ellos. No haría ningún avance sino me
ganaba a los cabecillas, suspiré pensativa. Había podido comprobar que el mayor
obstáculo en todo aquello era que no respetaban a los adultos, especialmente a los profesores y en parte llegaba a
comprenderlo. Todos mis compañeros tenían una idea fija sobre mis alumnos y no
dudaban en juzgar por apariencias o errores del pasado, cosa que parecía
fomentar su mala conducta o su tendencia a ser desafiantes.
Entre al aula esa mañana para encontrarme que aún no habían
llegado, suspiré con pesadez y me senté, aparte las gafas y me masajeé el
puente de la nariz. Había estado hasta tarde corrigiendo unas redacciones de
2ºB, todas estaban bastante bien, tenían un inglés acorde con su curso. En
cambio mi grupo, ni siquiera había reunido el esfuerzo de hacer los ejercicios
que mandaba ni una sola vez. Era bastante frustrante. La puerta se abrió dando
paso a la enfermera, Min Ah que parecía a punto de asfixiarse.
-Min Ah, ¿Qué pasa? – Me incorporé extrañada al verla en ese
estado.- ¿Estas bien? – me acerqué posando una mano en su espalda intentando
reconfortarla un poco.
-Sí, sí, no te preocupes por mí. El jefe de estudios tiene a
unos cuantos de tus alumnos y está amenazando con echarlos. Pensé que te
gustaría que alguien te informase.- Lo balbuceó todo rápidamente aun algo asfixiada
pero pude entenderlo. Fruncí el ceño,¿si Min Ah no hubiese venido a informarme
no habría sabido nada?
-¿Están en la sala de profesores? – Ella asintió en
respuesta y salí disparada hacia allá, sin si quiera pararme a oír si ella
tenía algo más que decirme.
Encontré a toda mi clase aglomerada en la entrada de la sala
de profesores, protestando y armando jaleo, obviamente nada contentos con
aquello. Me abrí paso entre ellos y
entré a la sala de profesores para encontrarme, nada más y nada menos que aquel
grupo de cinco miembros que me traía de cabeza, estaban todos plantados frente
al jefe de estudios que en comparación a ello parecía un enano, todo hay que
decirlo. Todos se giraron para ver quien había irrumpido en el lugar y vi los
gestos furiosos de algunos de los miembros de aquel grupito, después pude ver
el brillo de superioridad y satisfacción en las facciones del jefe de estudios,
cosa que no hizo más que aumentar mi aversión hacia su persona.
-¿Qué se supone que pasa aquí? , ¿Por qué tiene a mis alumnos
aquí? – Me planté frente a él frunciendo el ceño. Si se pensaba que yo me iba a
dejar manejar por un estúpido como él, podría esperar sentado. En respuesta el
jefe de estudios sonrío entre divertido y sarcástico.
-¿De que le sorprende que estén aquí? ¿Acaso no le dije que
eran de lo peor de este instituto? – Le dediqué una mirada asesina que hizo que
por un momento carraspease incómodo y se arreglase la corbata, desviando la
mirada.- Hace unos días desaparecieron varios portátiles de la sala de informática
y sus alumnos han sido acusados del robo
por dos alumnos de 2ºA, que aseguran haberles visto entrar a las aulas de
informática y salir con ellos. – Mire hacia mis alumnos, luego al jefe de
estudios y por último busqué con la mirada a los supuestos “testigos”.
-¿Y dónde se supone que están esos “testigos”? –Éste se
removió nerviosamente en el sitio, cosa
que me hizo sospechar y acercarme más a ese sujeto con cierto aire
amenazador, notaba la mirada de todos mis alumnos clavadas en la nuca, lo que
me hacía sentir como un animal de circo. Pero entendí que si demostraba que
estaba dispuesta a defenderles quizás conseguiría llegar un poquito a ellos.-
¿hm?
-¡P-Pero que más da eso! Se ha cometido un robo en el centro
y estoy más que seguro de que han sido alguno de sus chicos, ellos son los más
problemáticos y no sería la primera vez que cogen algo sin preguntar a nadie.
Además no pienso exponer a dos buenos alumnos para que en venganza ellos les
intimiden- siguió farfullando y tartamudeando, nervioso.-
-¿Me está diciendo que los acusa, sin pruebas de algo sólo
porque en el pasado han cometido errores? – Me giré para enfrentar a esos
chicos.- ¿Habéis robado los portátiles?- Percibí el recelo y la desconfianza en
sus miradas y el primero en contestar fue el rubio listillo, Insoo.
-Nosotros no hemos hecho nada, aunque está claro que no vas
a creernos y nos culparas como hacen los demás.- Gruñó cruzándose de brazos.
Les dediqué una sonrisa conciliadora que pareció desconcertarles y miré
nuevamente al jefe de estudios.-
-Ellos no han sido.- Me encogí de hombros y vi el estallido
de furia en los ojos del jefe de estudios.
-¿¡Es que no ves que están mintiendo!? – Aquel hombre no
estaba acostumbrado a que se le llevase la contraria y parecía estar
acostumbrado a intimidar con gritos a la gente. Personalmente, no me intimida
un hombre con voz de marujita histérica, más bien me estaba produciendo un
insoportable dolor de cabeza. Alce una mano para hacerle callar y le miré
seriamente.
-Usted cree a dos alumnos simplemente porque son buenos
estudiantes y si es que existen esos supuestos testigos. Yo creo a mis alumnos,
que están aquí y ahora siendo acusados de algo que aseguran no haber hecho.
Confió en su palabra y porque usted tenga prejuicios no significa que yo vaya a
verles con sus mismos ojos. Así que hasta que no muestre una prueba real de su
acusación, deje a mis alumnos tranquilos.- Mientras decía esto surgió cierto
tono amenazante en mi voz que él pareció captar y no pareció demasiado contento
con ello.
-Bien, si tanto confía en ellos, ¿estaría dispuesta a jugarse
su puesto de trabajo? Si ellos son culpables, la despido.
-Me parece justo. Pero si usted está equivocado, que lo
está, tendrá que disculparse personalmente con cada uno de los alumnos que ha
calumniado.- Asentí y el pareció sorprendido y algo irritado. Al igual que los
presentes pues oí más de un jadeo de sorpresa. Me giré para enfrentar a aquel
grupo y pude ver sus miradas de extrañeza.- venga vamos, ya hemos perdido
demasiado tiempo de la tutoría. Pase un buen día señor Bang.
Salí de la sala de profesores seguida de cerca por mis
alumnos que me miraban como si fuese un alienígena de otro planeta. Me estaba
jugando el puesto de trabajo en esto, pero,tenía confianza en que decían la verdad, no obstante había
que encontrar al culpable del robo para que el Jefe de estudios Bang, se
disculpase adecuadamente con mis alumnos. Al llegar al aula entramos y me fui a
mi mesa sentándome sobre ésta pensativa.
-¿Por qué ha hecho esa estupidez? – Una voz masculina llego
hasta mis oídos sacándome de mis pensamientos, era JunQ, uno de los miembros de
aquel grupo que había sido llamado a la sala de profesores.
-Lo he hecho porque confío en vuestra palabra y porque no
soporto que la gente juzgue por el exterior.- Conteste sin vacilación ni
parrafadas, era lo que creía y aun sabiendo que no me creerían, estaba
dispuesta a defender su inocencia a toda costa, me levante de la mesa
decidida.- Vamos a averiguar quien ha robado los portátiles y porqué os acusan
a vosotros.- Oí la risa divertida de varios chicos y fruncí el ceño irritada.-
Lo estoy diciendo en serio, si no os esforzáis por saber quien os está haciendo
esta putada, os van a seguir acusando de cosas que no habéis hecho y las
personas verdaderamente responsables no sabrán cuales son las consecuencias de
sus actos.