Autora del fic o historia: Maite.
Twitter : @Mai_seo94
Nombre del fic o historia: One Chance.
Tema : Hetero, +18 , fanfic [Zico x Fan (Un poco de U-Kwon x Fan)], Block B, serie.
-Capítulo 9.-
Twitter : @Mai_seo94
Nombre del fic o historia: One Chance.
Tema : Hetero, +18 , fanfic [Zico x Fan (Un poco de U-Kwon x Fan)], Block B, serie.
-Capítulo 9.-
No
conseguía dormirme, llevaba ya unas dos horas dando vueltas en la cama,
recordando aquel abrazo con Zico, no sabía por qué no me podía quitar aquella
imagen de la cabeza.
Me senté en el borde de la cama, abrazando mis rodillas, apoyando mi barbilla sobre mis ellas, recordé el momento en el que sonó su móvil, recuerdo que quise que no contestara la llamada y que se quedara abrazándome, cosa que hizo que me enfadara conmigo misma.
Me levanté de golpe de la cama y me dirigí hacia la puerta, pero antes de salir me dirigí hacia la mesilla de noche, cogiendo mi móvil con los auriculares y la llave, seguidamente fui hacia la puerta y salí, cerrando suavemente la puerta, cuál fue mi sorpresa al mirar hacia la derecha, estaban Ari y Top besándose, no de esos besitos tiernos, parecía que lo iban a hacer ahí mismo, no podía creérmelo, así que les saqué una foto, para así enseñársela a Sandy por la mañana.
Silenciosamente me fui por el lado contrario en el que estaban, no quería interrumpirlos. Después de caminar por el hotel durante una media hora, decidí ir a un pequeño jardín en el que había una fuente, parecía ser bastante tranquilo, así que me senté en la fuente, poniéndome los auriculares, poniendo una canción aleatoria, la primera canción que sonó fue Heaven’s Door de Eric Nam, era una canción que podía sacar una sonrisa a cualquiera y yo no iba a ser la excepción, mientras escuchaba esa canción miré hacia el cielo, se podían ver un montón de estrellas, no como en Seúl, que apenas se podían ver por la contaminación lumínica, la verdad es que me estaba relajando tanto que pensé que podía estar durmiéndome, así que me levanté y me fui a mi habitación, ya era hora de que intentara dormir aunque fueran unas horas.
Me senté en el borde de la cama, abrazando mis rodillas, apoyando mi barbilla sobre mis ellas, recordé el momento en el que sonó su móvil, recuerdo que quise que no contestara la llamada y que se quedara abrazándome, cosa que hizo que me enfadara conmigo misma.
Me levanté de golpe de la cama y me dirigí hacia la puerta, pero antes de salir me dirigí hacia la mesilla de noche, cogiendo mi móvil con los auriculares y la llave, seguidamente fui hacia la puerta y salí, cerrando suavemente la puerta, cuál fue mi sorpresa al mirar hacia la derecha, estaban Ari y Top besándose, no de esos besitos tiernos, parecía que lo iban a hacer ahí mismo, no podía creérmelo, así que les saqué una foto, para así enseñársela a Sandy por la mañana.
Silenciosamente me fui por el lado contrario en el que estaban, no quería interrumpirlos. Después de caminar por el hotel durante una media hora, decidí ir a un pequeño jardín en el que había una fuente, parecía ser bastante tranquilo, así que me senté en la fuente, poniéndome los auriculares, poniendo una canción aleatoria, la primera canción que sonó fue Heaven’s Door de Eric Nam, era una canción que podía sacar una sonrisa a cualquiera y yo no iba a ser la excepción, mientras escuchaba esa canción miré hacia el cielo, se podían ver un montón de estrellas, no como en Seúl, que apenas se podían ver por la contaminación lumínica, la verdad es que me estaba relajando tanto que pensé que podía estar durmiéndome, así que me levanté y me fui a mi habitación, ya era hora de que intentara dormir aunque fueran unas horas.
# 6 Horas más tarde.
Alguien
estaba aporreando mi puerta como si no hubiera un mañana, así que desganada fui
hacia la puerta de la habitación y con cara de malos amigos la abrí, era Zico.
-Buenos
días sirvienta, ¿estás preparada para lo que te espera hoy?-
Dijo
sonriente, parecía estar fresco como una
lechuga, se estaba dirigiendo hacia la cama, sentándose en ella.
-Pues la
verdad es que no, estaba durmiendo y me gustaría dormir un poco más, así que
fuera de mi cuarto, vuelve en dos horas o nunca. –
Me
acerqué con cara de pocos amigos hacia la cama, tirándome sobre ella, abrazando
la almohada.
-Déjanos
un rato más a mí y a mi novia disfrutar de nuestro amor, así que ya sabes dónde
está la puerta. –
Dije con
la cara pegada a la almohada, aún media dormida, quería dormir más, quería
dormir hasta que mi cuerpo quisiera, pero al parecer Zico no estaba de acuerdo
con eso.
-Ya
podrás estar con tu novia más tarde, venga levanta, que hoy te tengo preparado
muchas cosas. –
Cogió
mis pies y tiró de ellos, haciendo que me arrastrara por la cama, sin soltar la
almohada.
Después de me tirara varias veces de la cama y de que yo subiera de nuevo en ella, como si fuera un gusano, me levanté, mirándole con mala cara.
Después de me tirara varias veces de la cama y de que yo subiera de nuevo en ella, como si fuera un gusano, me levanté, mirándole con mala cara.
-Vale,
pero fuera de mi cuarto, me gustaría cambiarme. –
Sin decir
palabra salió por la puerta.
Busqué entre la ropa que había traído un pantalón largo y una camisa cómoda, el día iba a ser largo y por lo menos quería estar cómoda. Después de cambiarme y maquillarme un poco y peinarme, cogí mis cosas y salí de la habitación y allí estaba Zico, apoyado en la pared, mascando un chicle.
Busqué entre la ropa que había traído un pantalón largo y una camisa cómoda, el día iba a ser largo y por lo menos quería estar cómoda. Después de cambiarme y maquillarme un poco y peinarme, cogí mis cosas y salí de la habitación y allí estaba Zico, apoyado en la pared, mascando un chicle.
-Bueno,
ya estoy lista. ¿Qué es lo que quieres que haga?-
Le miré
fijamente, sonriendo falsamente.
-Lo
primero, en todo el día me tienes que llamar amo y lo segundo, no puedes
rechazar nada de lo que te pida.-
Me miró
sonriendo maliciosamente, acercándose a mí, cogiendo una de mis manos.
-Serás
cabrón.. –
Zico rio
levemente ante esa frase, cosa que a mi no me hizo ni una pizca de gracia.
Lo primero que hizo fue llevarme hasta el spa que había en la misma planta en la que se encontraba la piscina.
Lo primero que hizo fue llevarme hasta el spa que había en la misma planta en la que se encontraba la piscina.
-Pide la
promoción de pareja para entrar al spa. –
Le miré
incrédula y le solté de la mano, negándome.
-Me
niego, olvídate. –
Zico me
volvió a coger de la mano bruscamente, tirando de ella, dejándome a escasos
centímetros de él, diciéndome con voz grave.
-Más
vale que lo hagas o si no te arrepentirás, preciosa.-
Se me puso
la piel de gallina a la vez que me
excitó, aquella voz tan grave me había pillado desprevenida, así que me alejé
asintiendo, acercándome hacia el mostrador, pidiendo lo que él me había
ordenado. En cuanto lo pedí me dieron dos toallas y unas llaves para poner
nuestra ropa.
Me acerqué a él con las toallas y las llaves en los brazos.
Me acerqué a él con las toallas y las llaves en los brazos.
-Ya
está, ¿ahora qué? –
Me miró,
como esperando a que dijera algo más, hasta que caí en la cuenta.
-Ya está
amo, ¿ahora qué?-
-Eso
está mucho mejor, pues ahora ve a tu cuarto a ponerte el bañador, no tardes más
de diez minutos, si no iré a por ti. –
Suspiré
y puse los ojos en blanco, le dejé las toallas y las llaves y me dirigí hacia
mi cuarto. Me puse el bikini y bajé de nuevo y ahí estaba él, esperando.
-Llegas
a tardar un minuto más y ahora estarías arrepintiéndote por eso.-
Cogí una
de las toallas y una de las llaves, suspirando, el día estaba empezando mal.
Dejé mi móvil y la llave del cuarto en la taquilla, encaminándome después hacia una de las duchas que había, para poder entrar en las distintas salas del spa estábamos obligados a usar esas duchas, y que hijos de perra, el agua salía jodidamente fría de aquellas duchas.
Dejé mi móvil y la llave del cuarto en la taquilla, encaminándome después hacia una de las duchas que había, para poder entrar en las distintas salas del spa estábamos obligados a usar esas duchas, y que hijos de perra, el agua salía jodidamente fría de aquellas duchas.
-Bueno,
primero vamos al baño turco, espero que no te desmayes, porque yo no te pienso
levantar. –
Le
fulminé con la mirada cuando dijo eso, pellizcándole el brazo.
-Más te
vale que me ayudes si me pasa algo, ya que estoy aquí porque tú me obligas. –
-Recuerda
que el trato fue así, el que ganaba le servía al otro durante un día entero. –
Puse
morros y entré en el baño turco, era una sala llena de vapor, con una fuente en
medio de ella, aquella sala olía a eucalipto, me senté en uno de los bancos,
teniendo una pequeña esperanza de que Zico no se sentara al lado mío, pero como
no, se sentó al lado mío, lo más pegado que pudo, pasando su brazo por mis hombros, acercándome más a él, cosa
que me puso bastante nerviosa.
-¿Qué
pretendes Zico?-
-¿Yo?
Nada, disfrutar de una mañana en el spa.-
-Te juro
que mañana te mataré. -
-Uuuh,
que miedo, bueno.. Ya que me vas a matar, deja que te de razones para ello.-
Repentinamente
noté como unos labios se pegaban a mi cuello, empezando a besarlo y a lamerlo,
cuando pude reaccionar levanté una mano para poder darle una torta, pero justo
en el momento en el que le iba a dar noté como la sujetó con fuerza.
-Más te
vale que te estés quieta si no quieres que te haga algo más. –
Susurró
Zico en mi cuello, sin soltarme la mano.