Autora del fic o historia: Maite.
Twitter : @Mai_seo94
Nombre del fic o historia: One Chance.
Tema : Hetero, +18 [Más adelante.] , fanfic [Zico x Fan (Un poco de U-Kwon x Fan)], Block B, serie.
-Capítulo 2.-
Twitter : @Mai_seo94
Nombre del fic o historia: One Chance.
Tema : Hetero, +18 [Más adelante.] , fanfic [Zico x Fan (Un poco de U-Kwon x Fan)], Block B, serie.
-Capítulo 2.-
#. 2 Meses más tarde.
Ya habían pasado dos meses desde que ese chico había
pasado por la tienda, no me había esperado eso porque normalmente no le
agradaba mucho a la gente o mejor dicho, me tenían algo de miedo por tener dos
piercing en los labios y unos pocos tatuajes, también me imagino que no ayudaba
a que fuera rubia y bastante blanca, en medio de mis pensamientos oí una
vocecilla que venía fuera de mi cabeza, giré mi rostro para ver qué pasaba, era
mi mejor amiga, Sandy repitiendo mi nombre
Llevaba toda la tarde con ella,
mi mejor amiga, una chica pelirroja, bastante alta y delgada, tan solo tenía un
año más que yo, pero cuando ambas estábamos juntas parecíamos dos niñas de 10
años, estábamos viendo un drama, pero la verdad es que nos estaba aburriendo un
poco, era de aquellos sobre la historia de Corea y no nos interesaba.
Sandy era inglesa. Por lo que me había contado ella, estuvo viviendo en Wembley toda su infancia, hasta que a los 18 se independizó, mudándose a Londres ella sola, intentando cumplir su sueño de escritora, pero desgraciadamente no lo consiguió, pero eso no le afectó, es más siguió intentándolo hasta llegar a donde estamos.
Por otra parte, yo soy francesa, nací y crecí en Suiza, en la parte francesa, en Genéve, tengo 19 años y por suerte si estoy consiguiendo realizar mi sueño, ser tatuadora.
La verdad es que aún agradezco al destino por hacer que la encuentre, aquel concierto de An Café en España hizo que nuestras vidas cambiaran, gracias a ese concierto ahora vivíamos en Corea, en Seúl y cada una intentaba cumplir su sueño; nuestros apartamentos estaban uno al lado del otro, vivíamos en un edificio bastante alto, nuestros apartamentos eran casi iguales, ambos tenían un cuarto, un baño y una cocina que se juntaba con el salón, lo único en lo que se diferenciaban era que cada una la tenía puesto a su gusto.
Sandy era inglesa. Por lo que me había contado ella, estuvo viviendo en Wembley toda su infancia, hasta que a los 18 se independizó, mudándose a Londres ella sola, intentando cumplir su sueño de escritora, pero desgraciadamente no lo consiguió, pero eso no le afectó, es más siguió intentándolo hasta llegar a donde estamos.
Por otra parte, yo soy francesa, nací y crecí en Suiza, en la parte francesa, en Genéve, tengo 19 años y por suerte si estoy consiguiendo realizar mi sueño, ser tatuadora.
La verdad es que aún agradezco al destino por hacer que la encuentre, aquel concierto de An Café en España hizo que nuestras vidas cambiaran, gracias a ese concierto ahora vivíamos en Corea, en Seúl y cada una intentaba cumplir su sueño; nuestros apartamentos estaban uno al lado del otro, vivíamos en un edificio bastante alto, nuestros apartamentos eran casi iguales, ambos tenían un cuarto, un baño y una cocina que se juntaba con el salón, lo único en lo que se diferenciaban era que cada una la tenía puesto a su gusto.
-Nos lo haremos en cuanto encontremos algún tatuador
que me convenza, sabes que los que hemos visto no me han gustado mucho, siempre
tienen algún fallo.-
En cuanto escuchó mi respuesta puso morros, como siempre.
- Mai.. Siempre me pones esa escusa, no vale..
Por cierto, hoy salimos, ¿verdad? -
Me dijo con una gran sonrisa
esperando mi respuesta impaciente.
- Claro que salimos, ¿vamos a la discoteca de
siempre o a alguna nueva? Yo la verdad es que esta vez quiero ir a Underground, me han dicho que hay buen
ambiente y que las copas están baratas. -
Mientras terminaba aquella frase me
levanté, estirando las piernas y los brazos, había estado al menos dos horas
con ella viendo la tele y se me habían dormido un poco las piernas.
- Entonces que
me dices, ¿Underground o la de
siempre? -
De un salto se levantó del sofá, cogiéndome de la mano llevándome a
mi propio cuarto, había olvidado mencionarlo, estábamos en mi apartamento, como
siempre
- Mai... Ya es hora que recojas
el cuarto, está lleno de mierda, hija. -
Me dio una colleja y seguidamente se dirigió a mi gran armario, caminando encima
de peluches y ropa que estaban en el suelo, buscándome algo, ya no le tenía que
pedir que me ayudara, ella sabía que lo tenía que hacer.
- Bueno, ¿hoy que me
vas a poner? -
Le dije mientras me ponía a un lado del armario, mirando la ropa
que iba rebuscando y tirando hacia mi cama, hasta que sacó un pantalón corto
negro con pinchos en donde estaban los bolsillos y una camisa negra de manga
larga, por delante se transparentaba por todo menos en la zona de los pechos,
tenía un poco de escote y era de botones, mientras que por la espalda era
totalmente transparente.
- Ponte los tacones negros que tienen pinchos en el
tacón. -
Me dijo mientras me ponía la ropa en una esquina de la cama doblada,
en cuanto terminó me acerqué a ella y la abracé
- ¿Qué sería de mi si no
estuvieras aquí? Gracias por ayudarme siempre, sabes que eres como una hermana
para mí... ¿No? -
Ella, con su gran sonrisa me devolvió el abrazo, zarandeándome
- Claro que lo sé, enana, bueno, en una hora vienes a mi piso, ¿vale? No tardes
más que eso, mo me hagas venir a darte una colleja por tardona. -
Soltó una
carcajada y se fue de mi cuarto, dirigiéndose después a la puerta de la
entrada, saliendo después del apartamento.
Lo primero que fui a hacer fue darme una ducha, me dirigí hacia el baño, me acerqué al pequeño mueble que tenía al lado del fregadero, cogiendo una toalla, dejándola encima de la puerta, para cuando saliera, me fui desnudando, dejando la ropa sucia en la cesta, abrí el grifo de la ducha y espere unos segundos hasta que el agua se calentara, en cuanto ya estaba a una temperatura que me parecía buena entré, dejando que el agua recorriera todo mi cuerpo, adoraba esas duchas de agua caliente, me relajaban y hacían que no pensara en nada; después de 20 minutos en la ducha salí de ella, cogí la toalla de la puerta y me enrollé en ella, después de estar otros 20 minutos en el baño, secándome el pelo, echándome una que otra crema y terminar de maquillarme me dirigí hacia el cuarto, aún con la toalla enrollada en mi cuerpo, en cuanto entré en el cuarto tiré la toalla en la cama, quedándome totalmente como si hubiera venido al mundo, bueno, con maquillaje; cogí mi ropa y me la puse, por suerte no tuve que buscar durante mucho los tacones, estaban debajo de la cama, en cuanto estuve totalmente preparada me dirigí hacia el espejo, mirándome, extrañamente me sentía bastante guapa ese día así que con una gran sonrisa me fui hacia la puerta del apartamento, cogiendo mi bolso, mis llaves y mi móvil, después de comprobar que no me faltara nada en el bolso salí de allí, cerrando con llave, en cuestión de segundos vi salir a Sandy de su apartamento, sonriendo y diciéndome.
Lo primero que fui a hacer fue darme una ducha, me dirigí hacia el baño, me acerqué al pequeño mueble que tenía al lado del fregadero, cogiendo una toalla, dejándola encima de la puerta, para cuando saliera, me fui desnudando, dejando la ropa sucia en la cesta, abrí el grifo de la ducha y espere unos segundos hasta que el agua se calentara, en cuanto ya estaba a una temperatura que me parecía buena entré, dejando que el agua recorriera todo mi cuerpo, adoraba esas duchas de agua caliente, me relajaban y hacían que no pensara en nada; después de 20 minutos en la ducha salí de ella, cogí la toalla de la puerta y me enrollé en ella, después de estar otros 20 minutos en el baño, secándome el pelo, echándome una que otra crema y terminar de maquillarme me dirigí hacia el cuarto, aún con la toalla enrollada en mi cuerpo, en cuanto entré en el cuarto tiré la toalla en la cama, quedándome totalmente como si hubiera venido al mundo, bueno, con maquillaje; cogí mi ropa y me la puse, por suerte no tuve que buscar durante mucho los tacones, estaban debajo de la cama, en cuanto estuve totalmente preparada me dirigí hacia el espejo, mirándome, extrañamente me sentía bastante guapa ese día así que con una gran sonrisa me fui hacia la puerta del apartamento, cogiendo mi bolso, mis llaves y mi móvil, después de comprobar que no me faltara nada en el bolso salí de allí, cerrando con llave, en cuestión de segundos vi salir a Sandy de su apartamento, sonriendo y diciéndome.
- ¿Nos
vamos?